El frío minuto a minuto se sentía con más fuerza. Era una madrugada de invierno, el resplandor de la luna tenía una intensidad que favorecía la llegada del visitante. Intento cerrar los ojos y no tengo éxito, al abrirlos veo las sombras fruto de una luna entrometida. Recorro toda la habitación con la vista, los sonidos de la noche ambientaron el viaje. El constante caminar de la luna provocó un cambio segundo a segundo en el paisaje de sombras, fue un espectáculo nunca antes visto. De pronto, las sombras se desvanecieron, el silencio se intensificó y una nueva sombra apareció, la vi con una gran curiosidad. El intenso anaranjado que se asomaba por la ventana, me confirmó que nuevamente el visitante me había vencido. Esta vez por culpa de un espectáculo de sombras orquestado por una intensa luna de invierno.
....... El insomnio, un gran generador de ideas.... y de "sueños".
2 comments:
Me parece una buena idea, sobre todo el estar jugando con tus propias vivencias y darles forma en un pequeño cuento.
Me gusta la intriga, la tensión que construyes, no saber bien a bien qué o quién es el visitante.
Un saludo
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